Foto Cred: Universal Pictures
Carrie Bradbury, escritora del Powderhorn
«El Mago de Oz» lleva más de un siglo cautivando al público y uniendo a todas las edades. Siguiendo la historia de Dorthy y sus amigos en su viaje para matar a la malvada bruja del Oeste, los lectores se sumergen en una historia sobre la valentía, la fuerza y el poder de la amistad. La historia del Mago de Oz se convirtió en un clásico para muchas generaciones, y sigue siendo popular y relevante para todos los grupos de edad.
Sin embargo, «Wicked», de Jon M. Chu, ha captado la atención de la nueva generación de fans. Con una puntuación del 89% en Rotten Tomatoes, la película ha sido un éxito de público.
Siguiendo una historia similar al libro «Wicked», escrito por la autora Winnie Holzman, la película transforma la historia en un musical entretenido y emocionante. La película abarca el arte del entretenimiento utilizando colores específicos y letras de canciones memorables.
La película comienza con una alusión al final de El mago de Oz, cuando los habitantes de Oz celebran la muerte de la malvada Bruja del Oeste. Se presenta a uno de los personajes principales, Glinda, mientras celebra la muerte con todos los demás ciudadanos. Glinda es la protagonista principal de la historia y se le ha concedido belleza y popularidad en su vida. El otro personaje principal, Elphaba, tiene unas circunstancias de vida muy diferentes y se ve obligada a esconderse todo lo posible. Esto crea desde el principio una fuerte división entre Elphaba y Glinda.
La música está cuidadosamente integrada a lo largo de la película, marcando el tono y añadiendo detalles a la historia. Canciones como «What Is This Feeling?» y «Popular» destacan las relaciones que se establecen en la Universidad de Shiz, como las de Nessarose (Marissa Bode), Boq Woodsman (Ethan Slater) y el príncipe Fiyero (Jonathan Bailey). Esto añade un elemento emocionante para los espectadores amantes de los musicales, especialmente de Wicked.
A lo largo de la película se tratan temas muy serios, como el maltrato animal, el abandono infantil y el maltrato a las personas con discapacidad. Estos detalles añaden profundidad a la historia, por lo demás infantil, atrayendo al público de más edad a los cines y reteniendo su atención.
Aunque a muchos les impresionó lo bien que se había tratado la historia y lo parecidos que eran el libro, el musical y la película, otros fans consideraron que se habían omitido muchas cosas. Algunos opinaron que las descripciones de los personajes no coincidían correctamente y que el tono sombrío de la historia se perdía en favor de las canciones alegres.
Los trajes seguían una combinación de colores rosa y verde, vista en muchos carteles de promoción y en los tráilers de la película. Glinda es conocida por vestir únicamente de rosa y otros personajes la califican de «rubia tonta», y Elphaba es menospreciada por su piel verde. Los demás personajes solían vestir de azul, gris y negro. Esto ayudó a la película con la promoción y comercialización.
La duración de la película hizo que algunos espectadores se aburrieran o se desvincularon. Con una duración de dos horas y cuarenta minutos, algunas personas abandonaron la sala antes de que terminara la película.
Sin conocer el libro ni el musical antes de ver «Wicked», la adaptación me sorprendió agradablemente. La película es larga, pero ni un segundo es aburrida, y el vestuario, los personajes y la actuación son impecables. Al salir del cine, ya estaba comentando sobre lo mucho que había disfrutado de la película. «Wicked» es una forma perfecta de pasar una noche con niños, abuelos y amigos, y sin duda merece la pena verla.
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